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MensajearMorelia, Michoacán, a 1 de diciembre del 2020.- Para dar continuidad al análisis dela Educación Profesional Técnica, en los países de la región, está poco a poco ha ido adquiriendo mayor presencia, tanto en el número de alumnos que atiende, como en el reconocimiento social que de esta deviene, considerando que la misma ha sido implementada para incluir a los jóvenes que no tienen las condiciones para ingresar al nivel superior y lograr una formación universitaria.
En los países de América Latina, la Formación Profesional Técnica, se caracteriza por ser de mayor absorción para los varones y de manera más particular los que provienen de sectores menos favorecidos y que se armoniza con las ideas de transformar la matriz productiva, en consecuencia se ubica la necesidad de revalorizarla, adaptarla al contexto, promoverla y desarrollar las condiciones e infraestructura que le permitan mejorar su oferta académica.
De esta manera, la Educación Profesional Técnica, se reconoce por los sistemas educativos, como un factor que puede ser detonante del desarrollo de los países, pues ella ayuda a incrementar la competitividad y por otra parte favorece el desarrollo de la estructura productiva, lo anterior como consecuencia de que forma para el trabajo y la mejora de las capacidades, en un contexto que requiere cada vez más de una verdadera articulación entre el sistema educativo y el mercado de trabajo.
Para lograr este cometido necesario y urgente, se hace necesaria la apertura de las ramas de la economía que presentan un mayor dinamismo, como pueden ser la informática, la robótica, los servicios relacionados con el turismo, como la gastronomía o los alimentos en general, los servicios de hotelería y la administración y promoción del mismo sector, que se pueden bien sumar a la oferta de las áreas tradicionales, como la electrónica, la mecánica, la construcción, las áreas agropecuarias y las relacionadas al arte.
La Formación Profesional Técnica, tiene grandes retos, el primero es el desarrollo de una oferta educativa integrada y articulada con los distintos niveles educativos, después deberá mejorar la calidad de los contenidos y la forma en cómo se realiza el hecho educativo y con ello facilitar la trayectoria educativa, para lo cual deberá considerar los contextos regionales en donde se ubica.
Lo anterior nos lleva a pensar en implementar currículos regionalizados, que permitan incrementar la matricula, que atiendan la diversidad, de forma tal que se pueda de alguna manera garantizar el ingreso de sus egresados al mercado laboral.
Las experiencias en los países de América Latina son distintas, por un lado, los que han implementado la Formación Profesional Técnica en el nivel secundario y con una gran oferta de programas, han alcanzado matriculas que superan el 40% como Cuba, Chile, Ecuador y El Salvador, en otros países como Argentina, Colombia, Paraguay y Costa Rica, tienen un 20%, mientras que en otros países como Bolivia, Nicaragua, Venezuela y Perú, no resulta significativa esta modalidad.
En otro comentario daremos cuenta de cómo se encuentra nuestro país y nuestro estado. Muchas gracias
