Atlético Morelia-Tapatío, hoy el primero de dos agarrones en busca de la corona de la Expansión

Morelia, Michoacán; 17 de mayo de 2023.- Esta historia ya la viví hace 42 años. Atlético Morelia y Tapatío vuelven a encontrarse en una final poco más de 4 décadas después, ahora en circunstancias diferentes, porque este es un equipo canario nuevo, es decir sin más historia que la de 3 años en la Liga de Expansión, y aquel había estado en el máximo circuito del futbol mexicano y jugaba en la Segunda División teniendo como sede el Estadio Olímpico Venustiano Carranza. Y este Tapatío era y es filial de las Chivas Rayadas del Guadalajara y tenía como ciudad sede la Perla del Cupatitzio, y jugó el partido de Vuelta en calidad de visitante.

Sí, hoy, a las 19:00 horas, en el Coloso del Quinceo, sonará el silbatazo inicial para los primeros 90 minutos de la final del Torneo Clausura 2023 de la Liga en Expansión. Los protagonistas serán los nuevos Canarios del Atlético Morelia y el Tapatío que, ahora tiene como sede el Estadio Akron, donde se disputará la Vuelta el domingo venidero. Será una batalla de 180 minutos (o más) de pronóstico reservado, porque si bien es verdad que el conjunto jalisciense fue mejor en todo a su rival durante la etapa ordinaria de la competición, también lo es que a este equipo moreliano hay que creerle todo, hasta demoler lo improbable.

La forma en que llegaron los Canarios a la final se recordará durante muchos años, no porque haya sido mejor que el Celaya, sino porque jugaba con un hombre menos y empató en el global y, después, ya con igualdad de jugadores en la cancha, su portero hizo un gol de portería a portería, como el que había hecho Félix Madrigal Pulido en el Venustiano Carranza, solo que en Primera División a Víctor Manuel Aguado, portero que defendía los colores de los Panzas Verdes del León. La anotación de Santiago Ramírez fue la del 1-3 (2-4 en el global), marcador con el que Atlético Morelia se clasificó a la final.

Bien, pero a diferencia de lo que sucedió con el original Atlético Morelia hace 42 años, ahora el partido de Vuelta será en la casa del Tapatío, lo que sugiere cierta pequeña ventaja para el equipo filial del chiverío, lo que no pasa de ser una insignificancia, porque ya se vio que los dirigidos por Morales y Scoponi no ven moros con tranchete y no les inhibe en lo más mínimo jugar en cancha ajena, amén de que vienen enrachados desde la llegada del entrenador piedadense y, por si fuera poco, traen la motivación a toda asta luego de eliminar al super líder de la competencia en su propia casa, es decir en el Estadio Miguel Alemán Valdez.

Sí, pero el conjunto de los Higuera y compañía llegará mermado a su encuentro de hoy, porque no podrá contar con Víctor Milke, un referente en su línea defensiva; ni con Bryan Mendoza, lo que tal vez sea mejor, porque se trata de un jugador temperamental que no ha dado el do de pecho; ni con Diego Mejía, mediocampista cumplidor cada que entra de cambio. Pero, bueno, ya se ha visto que el cuadro canario tiene buena banca para el nivel de la Liga de Expansión, claro está, por lo que es de esperarse que no le cale mucho la ausencia de Milke, porque lo que es la del llamado Cobra no le pesará en lo más mínimo.

Tapatío, por su parte, será muy diferente a lo que fue el Celaya, porque seguramente Gerardo Espinoza y su cuerpo técnico ya le hicieron ver a sus dirigidos que deben estar muy truchas y no se deben confiar, ni descuidar, ni un instante, porque este Atlético Morelia es como los tlacuaches, a veces parece muerto, pero nada más parece porque está más vivo que un inmortal. Sea como fuere, lo cierto es que se esperan dos partidos vibrantes, de mucho esfuerzo y acometidas en las dos porterías, por lo que ahora sí que se ve una igualdad de capacidades y, por ende, de posibilidades. Sin embargo, solo uno será campeón, así que será hasta el domingo venidero en la Perla Tapatía donde se devele el misterio. Así sea.